Frases
El remordimiento es inconsolable.
La filosofía es la que nos distingue de los salvajes y bárbaros; las naciones son tanto más civilizadas y cultas cuanto mejor filosofan sus hombres.
Para entender el corazón y la mente de una persona, no te fijes en lo que ha hecho, no te fijes en lo que ha logrado, sino en lo que aspira a hacer.
La ambición suele llevar a las personas a ejecutar los menesteres más viles. Por eso, para trepar, se adopta la misma postura que para arrastrase.
Todo el mundo quisiera vivir largo tiempo, pero nadie quisiera ser viejo.
Cuando en el mundo aparece un verdadero genio se puede reconocer por este signo: todos los necios se conjuran contra él.
La mayoría de las personas son como alfileres: sus cabezas no son lo más importante.
Los mejores médicos del mundo son: el doctor dieta, el doctor reposo y el doctor alegría.
Nada es constante en este mundo sino la inconstancia.
No hay razón para buscar el sufrimiento, pero si éste llega y trata de meterse en tu vida, no temas; míralo a la cara y con la frente bien levantada.